90%. Tinto Fino (Tempranillo) y 10% Cabernet Sauvignon
D.O. Ribera del Duero
Vino equilibrado con estructura y carnosidad. Un vino largo y muy aterciopelado con una crianza de 15 meses en barrica.
Cata
Vista: Color rubí de capa alta, con notas guinda arropadas por matices rosáceos. Limpio y brillante.
Nariz: Los aromas aún varietales son los primeros en presentarse, bien acompañados por un torrefacto suave bien conjugado con un toque final de regaliz, más fino si cabe.
Boca: Estructurado y carnoso con un excelente 'bouquet' que se mantiene retronasal después de llenar la boca de intenso sabor. Perfectamente equilibrado, largo y generoso en sensaciones gustativas.
Temperatura de servicio: 16-17ºC.
Grado Alcohol: 14,5% vol.
Vinificación
Viñedos
Reconocimientos
95 Puntos Guía Gourmets
91 Puntos Peñín
91 Puntos Suckling
Bodega
Carmelo Rodero pertenece a la cuarta generación de una arraigada familia de viticultores. Sus bisabuelos elaboraban vino en antiguos lagares y sus abuelos fundaron la Cooperativa de Pedrosa de Duero en Burgos.
A los 14 años, Carmelo ya cultivaba la tierra con los primeros tractores que se vieron en la zona, y finalizado el servicio militar inició la compra y el cultivo de sus propios viñedos.
Se desvinculó de la cooperativa y el fruto de sus entonces 30 hectáreas fue adquirido durante 14 años por Vega Sicilia.
Convencido de que la calidad de sus “perlas negras” (como le gusta llamarlas) son la base inequívoca de un buen vino, apostó por el futuro e inició su propia andadura, presentando al mercado su primer vino de la cosecha de 1991. Desde entonces, cada año sus vinos han recibido numerosos reconocimientos de la crítica especializada.
Actualmente posee 140 hectáreas de diferentes parcelas seleccionadas. La edad media del viñedo se sitúa en 30 años, con cepas de 10 años y otras de 70.
La variedad autóctona Tinta del país o Tinto fino (Tempranillo) ocupa un 85% de la superficie total del viñedo, la Cabernet sauvignon un 10% y un 5% la Merlot. Todas ellas se distribuyen en suaves laderas que poseen los atributos propios y singulares de la Ribera del Duero.
Las prácticas de cultivo persiguen la máxima concentración en cada grano no superando en ningún caso los 4.000 kg/ha y seleccionándose antes de su entrada al depósito.
La zona presenta un clima mediterráneo con influencia continental, pluviometría moderada tirando a baja, con veranos secos e inviernos largos y rigurosos.
El suelo es de sedimentos terciarios de capas más o menos lenticulares de arenas limosas o arcillosas con alternancia de capas calizas, margas e incluso concreciones calcáreas.
El relieve de la zona oscila entre las lomas interfluviales y los valles, con una altura topográfica entre los 750 y 850 metros.
Maridaje
Cordero asado, cerdo asado, cocido, caza menor, pastas con carne, arroces con carne, setas, embutidos, quesos semicurados.